28 feb 2014

Educación Emocional


"Siento, luego existo"


Gracias a las redes sociales, y a la contínua interconexión que hoy en día tenemos al alcance de nuestras manos, tropecé con este precioso documental de Andrew Czajkowski narrado por  la profesora Luz Guerrero (Escola Sagrada Família de Gavà), a través de una buena amiga mañica que reside en Lanzarote, y como lo que no se comparte, se pierde, merece la pena dedicarle unos minutos.

De una manera muy clara y sencilla se explica qué es la educación emocional, y cómo se puede enseñar a los niños desde muy pequeños (en este caso desde la escuela, pero podemos trasladarlo a la familia y al entorno).

Solemos dar mucha importancia a adquirir conocimientos, que lo es, pero dejamos de lado las emociones o no les prestamos la atención que se merecen. En la sociedad actual, donde todo cambia vertiginosamente, y los conocimientos están al alcance de todos y en todos los formatos posibles, nos enfrentamos a conflictos/problemas que antes no teníamos, pero afortunadamente (para padres y educadores principalmente) disponemos de herramientas que nos ayudan a afrontar estos cambios de otra manera.

Como bien dice la profesora en el documental "cabeza y corazón están conectados", luego, deberíamos ocuparnos de la educación de ambos si deseamos la felicidad para nuestros hij@s/alumn@s.

Tarea imposible? No.

Difícil? Tampoco.

Se puede aprender? Si.

La cultura en la que hemos crecido muchos de nosotros, nos ha enseñado que no "es de buena educación" manifestar pública ni efusivamente nuestras emociones. "No llores, no te enfades, no te rías así..." La pauta ha sido reprimirlas, porque expresarlas era signo de falta de autocontrol, debilidad o inmadurez.

Con esto, no pretendo defender que dejemos a nuestras emociones gobernar nuestra vida por su cuenta, no es esta mi intención, pero si aprendemos a identificarlas, ponerles nombre, y analizar cómo, cuándo y dónde aparecen, dispondremos de una valiosísima información que nos ayudará en nuestro día a día.

Por supuesto que para conseguir este aprendizaje se necesita esfuerzo, por eso me parece tan buena idea incorporar las pautas que enseña la profesora Luz a sus alumnos, es más, creo que los niños lo tienen mucho más fácil que los adultos a la hora de incorporar estos aprendizajes en sus rutinas diarias. Los adultos tendríamos que "desaprender" para aprender educación emocional, pero también podemos aprender.

Y padres y educadores deberíamos estar los primeros en la lista para aprender educación emocional y así poder enseñarla a los niños desde edades tempranas

Seguro que comprenderéis mejor el mensaje de este artículo viendo el documental, que lo disfrutéis y que aprendáis de él como he aprendido yo.





Gracias por estar ahí, después de tantos meses sin publicar, seguiremos compartiendo emociones.